Este componente electrónico procesa la información que llega al dispositivo y la transforma en imágenes o vídeos para mostrarlos visualmente. Es ideal para trabajar con aplicaciones gráficas, ya que permite obtener imágenes más nítidas. Calidad de imagen Criterio fundamental a la hora de elegir una tarjeta de vídeo, su resolución de 7680x4320 no te defraudará. Decodificar los píxeles de la pantalla te permitirá ver hasta el más mínimo detalle de cada ilustración.